domingo, 21 de octubre de 2018

Obí

Obí


Obí era puro, humilde y simple, por eso Olofin hizo blanca su piel, su corazón y sus entrañas y lo colocó en lo alto de una palma. Eleguá, el mensajero de los dioses, se encontraba al servicio de Obí y pronto se dio cuenta de que este había cambiado.

Un día Obí decidió celebrar una gran fiesta y mandó a invitar a todos sus amigos. Eleguá los conocía muy bien, sabía que muchos de ellos eran las personas más importantes del mundo, pero los pobres, los enfermos y los deformados, eran también sus amigos y decidió darle una lección invitando a la fiesta no solamente a los ricos.

La noche de la fiesta llegó y Obí, orgulloso y altivo, se vistió para recibir a sus invitados. Sorprendido y disgustado vio llegar a su fiesta a todos los pobres y enfermos. Indignado les preguntó:

–¿Quién los invitó?

–Eleguá nos invitó en tu nombre –le contestaron.

Obí los insultó por haberse atrevido a venir a su casa vestidos con harapos.

–Salgan de aquí inmediatamente –les gritó.

Todos salieron muertos de vergüenza y Eleguá se fue con ellos.

Un día, Olofin mandó a Eleguá con un recado para Obí.

–Me niego a servir a Obí –dijo Eleguá–. Ha cambiado mucho, ya no es amigo de todos los hombres. Está lleno de arrogancia y no quiere saber nada de los que sufren en la Tierra.

Olofin, para comprobar si esto era cierto, se vistió de mendigo y fue a casa de Obí.

–Necesito comida y refugio –le pidió fingiendo la voz.

–¿Cómo te atreves a aparecerte en mi presencia tan harapiento? –le increpó el dueño.

Olofin sin disimular la voz exclamó:

–Obí, Obí.

Sorprendido y avergonzado, Obí se arrodilló ante Olofin.

–Por favor, perdóname.

Olofin le contestó:

–Tú eras justo y por eso fue que yo hice tu corazón blanco y te di un cuerpo digno de tu corazón. Ahora estás lleno de arrogancia y orgullo. Para castigar tu soberbia te quedarás con las entrañas blancas, pero caerás y rodarás por la tierra hasta ensuciarte. Además tendrás que servir a los orishas y a todos los hombres.

Así fue como el coco se convirtió en el más popular de los oráculos.

sábado, 20 de octubre de 2018

Patakíes

Oríshá Oko


Después que Olokun lo invadió todo con sus aguas, a los habitantes del planeta no les quedó otro remedio que refugiarse en la montaña más alta.

Muchos fueron los intentos de llamar la atención de Olofin para que solucionara aquella situación tan difícil. Los hombres idearon hacer una gran torre que llegara al cielo, pero los albañiles de tanto trabajar aislados terminaron hablando un lenguaje que los demás no podían entender, otro tanto les pasó a los carpinteros y así a cada grupo de trabajadores.

De esta suerte surgieron distintos idiomas y se hizo tan difícil continuar que poco a poco fueron abandonando la construcción del edificio.

Un agricultor que se llamaba Oko tuvo una idea mejor. Con sus aperos de labranza hizo siete surcos inmensos en la montaña y sembró cada uno con plantas de un color diferente.

Una mañana que Olofin miró hacia la Tierra divisó el dibujo que Oko había realizado. Tanto le gustó que de inmediato ordenó que se hiciera un puente con siete colores iguales a los que estaban en la montaña para que el autor de aquella maravilla pudiera subir a su palacio.

viernes, 19 de octubre de 2018

Oríshá Oko

Oríshá Oko

Es el Orishà que nos enseña cómo cultivar nuestras vidas y la tierra. Es aquel que primero construye una finca. Es el campesino cultivando su tierra y recogiendo sus cosechas para alimentar a su familia.  

Cuando vemos a Orìshà Oko en la naturaleza vemos su energía cultivando.
 Él es el proveedor de los alimentos y la vida. Es la reencarnación para muchas formas de vida también de los humanos. Él conoce como hacer crecer las cosas. 

Orisha mayor, deidad de la tierra, la agricultura y las cosechas.   Patrono de los labradores. Es considerado árbitro de las disputas, especialmente entre las mujeres en la naturaleza vemos su energía cultivando.Es el juez que celebra los juicios entre los Orishas. 

Asegura la prosperidad de la tierra y las abejas son sus mensajeras. Es el responsable de la alimentación en el mundo, ya que es la tierra misma, el espíritu generador que anima las plantas y los animales.

Collar Oríshá Oko
SUS COLLARES: Son de 7 cuentas rosadas o lilas y 7 cuentas azul turquesa pálida. Se le puede
adornar con corales.

SUS TRAJES: Es de color rosado o lila y azul turquesa pálido, va adornado con bordados,

Traje de Oríshá Oko
Imagen de Yoruba LLC
SUS HIJOS: Son persones discretas, trabajadoras y responsables. Pendientes de las personas que de alguna forma dependen de ellos. Además tienen una mentalidad clara. Su justicia está regida por el deseo del bien común. No son amigos de fiestas ni mujeriegos, además tienen un respeto extraordinario por el ser humano.


MAFEREFUN ORÍSHÁ OKO


miércoles, 17 de octubre de 2018

Patakies


El perro de Shangó

Ogún le gustaba tomar otí en un establecimiento que era propiedad de Yemayá, la esposa de Shangó. Pero a Ogún le empezaron a ir mal los negocios y lejos de renunciar a la bebida, se entregó a ella con más fuerza. Su dinero se acabó y su cuenta creció en aquel establecimiento.

Fue en vano que, una y otra vez, la mujer quisiera cobrarle al marchante lo que adeudaba. Todo se convertía en evasivas de su parte.

Enterado Shangó de que Ogún no había querido pagarle a Yemayá el monto de la cuenta de sus tantas borracheras, fue a casa de este con la intención de cobrarle por las buenas o por las malas.

Cuando Ogún vio a su antiguo rival y actual acreedor acercarse a su vivienda, le ordenó a uno de sus perros que lo atacara. El bravo animal se lanzó sobre Shangó, el que sin inmutarse le puso una mano en la cabeza y comenzó a pronunciar un conjuro que lo hizo empequeñecerse de inmediato.

Ogún se reconoció perdido y le juró a Shangó que pagaría al día siguiente. El dueño del fuego aceptó el plazo y le exigió que, además, le entregara el perro.

Desde entonces Shangó tuvo también su perro que como es pequeño se llama Lube.

martes, 16 de octubre de 2018

Patakies

Oshún y Majá

Oshún era la esposa de Ogún, el temible orisha del hierro y las fraguas. Un día en que se sentía mal del estómago consultó al dilogún y le salió que tenía que hacer rogación con ekú, eyá, epó, akukó y poner cuatro trampas en su casa.

Sucede que Majá, que era hijo de Ogún, entraba todos los días subrepticiamente a la casa, comía millo, y luego tomaba agua de la tinaja de Oshún. Como Oshún tenía prohibido comer millo, al tomar del agua que Majá contaminaba se había enfermado.

Aquel día Majá entró en la casa y luego de disfrutar del banquete que había preparado Oshún, quiso salir por uno de los resquicios que utilizaba con frecuencia. Pero como ahora estaba más gordo y Oshún había puesto la trampa, no pudo salir.

Fue así como la dueña de la casa lo sorprendió y le prohibió que volviera a entrar allí.

viernes, 12 de octubre de 2018

Oraciones

Obba


Obá, que por amor ofrendaste
Lo que creías más preciado para tu ser amado.

No permitas que arma cortante alguna
Cercene el amor de mi futura…
Que causan heridas en mi cuerpo

O en alguna otra cosa animada.

Y si por acaso por ventura otros ojos la mirasen,
Que no sean los míos los que por ella llorasen.
Con tu ayuda rivales no he de temer.
Con tu fuerza yo los podré vencer.

Elemento filoso, para mí no será peligroso.
Y todo aquel que contra mí se avenga
Hazle comprender que nadie escapa a lo que detenta.

Que en el flujo de nuestras vidas
Obtendremos felicidad, paz o mentiras.
Según la semilla que plantemos
Será la bandera que enarbolamos.

Que nadie corte con guadaña o navaja filosa
Lo que el amor en forma frondosa
Nos prodiga a cada rato.
Protégeme a mí…………………….y a……………..
Para que nada ni nadie ni nadie nos separe.
Salves y reines, Obá.

jueves, 11 de octubre de 2018

Oraciones

Babalú Ayé


Babalú Ayé
Hijo de Naná Burucú,
De paja de la costa tu traje
Que no deja adivinar tu cuerpo ni imagen
Debajo de él.

Recoges las heridas
Y males psicoespirituales.

Cuando al que fe en ti tenga
De todos los dolores y males.
Aleja, atotó, a las enfermedades
De mí, de mis seres queridos y de…………..,

Como a San Roque se le pide.
A San Pantaleón que cure las heridas
O San Blas para sanar las anginas a ti te pido,
Que quites las espinas
Que quisieran hacerme sangrar
Y retirar de mí las dolencias
Que me pudieran perturbar.